Vamos a proceder a la restauración de un soldado de plomo que debido al paso del tiempo y de un mal mantenimiento ya no luce como debe ser.
Esta figura presenta varios “pegotes” de pegamento que el anterior propietario ha ido poniendo al desprenderse la figura de la peana, y al desprenderse algunas partes de la misma.
Hemos sumergido la figura en sosa caustica durante varias horas para que se desprenda la pintura y los restos de pegamento ( con las figuras antiguas funciona mejor que los disolventes)
Se ha procedido a sanearla y soldar las distintas piezas con estaño ( a la antigua usanza)
La hemos imprimado y después de la sesión de pintura este es el resultado.
En Resumen:
– Hemos decapado la figura
– Saneamiento de la misma y eliminado de las marcas del molde
– Soldado de las piezas que estaban rotas o despegadas, incluida la base
– Imprimación de la figura
– Pintado de la misma y barnizado para su conservación (dos capas)
En todo momento hemos tratado de respetar el estilo de la época
P.Macanás